Si de tanta seguridad dispone el Vicepresidente del Gobierno, Señor Rubalcaba, como para asegurarnos que nos encontramos en la antesala de la disolución de la banda terrorista ETA:
¿Por qué no nos traslada una información más concreta al respecto?
¿Por qué seguimos sin conocer nada de las implicaciones del Ministerio del Interior en relación al caso Faisán?
Es más, pero si en un hipotético caso fuese cierta la afirmación de la posible disolución de la banda terrorista:
¿ETA mantiene actualmente un control tan férreo entre sus seguidores como para que puedan asegurarnos que nadie de esos entornos se tomaría la justicia por su mano, empuñando un arma con la que pudiera matar o agredir a otro ciudadano vasco comprometido con la defensa de las libertades y la democracia?
¿Por qué el Sr. Rubalcaba quiere visualizar tan rápidamente la posibilidad anterior, pero sin aportarnos pruebas, ante la opinión pública española?
Y si el Vicepresidente, Sr. Rubalcaba, tuviese alguna duda sobre los interrogantes anteriores:
¿Por qué no deja transcurrir un tiempo prudencial antes de suprimir escoltas a personas significadas frente al terrorismo de ETA?
¿Suprimirá el Sr. Rubalcaba, que reside en la Comunidad de Madrid, a sus escoltas como medida ejemplarizante?
¡Cuanta ignominia! ¡Cuánto juego sucio! ¡Cuanta presión a personas que han dejado la piel por la defensa de las libertades! ¡Cuanta falta de respeto a los ciudadanos de éste país! Ojala nadie tenga que lamentar esta decisión que quiere adoptar el Gobierno de España y el de la Comunidad Autónoma Vasca, ambas lideradas por personas pertenecientes al PSOE
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